Trump es mi nuevo Súperman

Por Eduardo Montalvo
edmont13@gmail.com

Cuando niño, solía leer revistas de historietas; llegué a coleccionar más de doscientas, siendo mis preferidas las de súper héroes, y las de Superman mis favoritas.
Lo que más me gustaba de este súper héroe eran sus asombrosos súper poderes.
Ahora, de adulto ya no leo historietas, pero he encontrado un súper héroe de carne y hueso que me gusta aún más que Superman y que llena mis días de entretenimiento. Este súper héroe se llama: Donald J. Trump.
 
A diferencia de Superman, Trump no tiene una fuerza descomunal, pero sí tiene una capacidad de trabajo y un aguante incomparables. A diferencia de otros presidentes que han envejecido prematuramente en el cargo, Trump luce cada día más rejuvenecido y mejor que antes.
 
Trump no puede volar, pero tiene el Airforce 1, con el que puede moverse a cualquier lugar del planeta a su antojo, en sólo cuestión de horas. Él puede amanecer en la Casa Blanca, almorzar en Maralago, y cenar en Afganistán, todo ello en un mismo día.
 
Otro súper poder que Trump no tiene es la invulnerabilidad, pero en cambio tiene el súper poder de la Verdad con el cual es capaz de vencer a los súper villanos demócratas que constantemente tratan de perjudicarlo. Él siempre sale ileso y vencedor porque la Verdad es irrefutable y siempre se impone.
 
Pero, lo que más admiro de Trump es su capacidad de imponer su voluntad sin la ayuda de nadie. Trump es capaz de resolver cualquier situación él sólo, sin la ayuda de asesores, ni de los miembros de su gabinete. Él hace y deshace, logrando resultados positivos. Si no me lo creen, échenle un vistazo a la economía, el desempleo,  y a la guerra comercial con China. Trump se ha salido con la suya gracias a su instinto de hombre de negocios  y a su gran habilidad de negociador.
 
Y, en cuanto a la política se refiere, sin ser político, ha sabido sortear las trampas y jugarretas de los “Villanos del Pantano”, incluida la intentona golpista del “impeachment”.
 
Sus enemigos han ido cayendo uno a uno, sus promesas se han ido cumpliendo, y su voluntad se ha impuesto a pesar de toda la oposición que ha tenido que enfrentar.
Hoy en día no existe nadie con mayor reconocimiento que Trump. Todo el mundo lo conoce y lo menciona, para bien o para mal;  no hay quien se escape de la enorme influencia que él ejerce.
Es el favorito de los medios, cuenta con al menos 63 millones de fervientes seguidores en nuestro país, y con el uso de Twitter pone al mundo de cabeza cada vez que se le antoja.
 
¡La verdad es que Trump, aún sin súper poderes es mi nuevo Súperman!